Idea y conceptos
Este trabajo es un autorretrato, un diario en el que la artista se convierte en sujeto de observación.
La idea que subyace parte de este texto de Roland Barthes : Roland Barthes, La cámara lúcida, (1990: 46-48):" Diríase que, aterrado, el Fotógrafo debe luchar tremendamente para que la Fotografía no sea la Muerte. Pero yo, objeto ya, no lucho. Presiento que de esta pesadilla habré de ser despertado más duramente aún: pues no sé lo que la sociedad hace de mi foto, lo que lee en ella (de todos modos, hay tantas lecturas de un mismo rostro); pero, cuando me descubro en el producto de esta operación, lo que veo es que me he convertido en Todo-Imagen, es decir, en la Muerte en persona; los otros - el Otro- me despropían de mí mismo, hacen de mí, ferozmente, un objeto, me tienen a su merced, a su disposición, clasificado en un fichero, preparado para todos los sutiles trucajes."
Relacionando conceptos como Identidad, actos expuestos pero a la vez poco examinados, experiencias compulsivas, el proyecto pretende generar un aumento de visibilidad de un proceso perceptivo, también emocional: el de las obsesiones. Un ojo-cámara que muestra obsesivamente al sujeto observado. La busqueda de una identidad contaminada que no se reconoce verbalmente pero que se aprecia en las metaforas simbolicas de conductas repetitivas y en muchos casos inadaptadas.
En definitiva, una metáfora de la neurosis de la mujer moderna con un alto nivel de introspección y conexión con su entorno pero con necesidad de desarrollar estrategias que le permitan disminuir el estrés que provoca la lucha constante contra un medio hostil, consciente de que hay mascaras que nos ocultan y máscaras que aún nos revelan para encontrar múltiples identidades.
La pieza audiovisual se compone de tres videos HD, cada uno de ellos describe y representa una semana, 3x7 = 21 dias de la artista con una duración de 6 min. y se pueden exponer individualmente o sincronizados en loop mostrando diferentes dias. El proyecto se completa en una o varias instalaciones, llamadas Altares, con piezas realizadas en collage y fotografias.
El trabajo audiovisual emplea principalmente material con un fuerte contenido identitario, como un archivo personal de fotografías e ilustraciones, que se someten a intervenciones repetitivas para animarlas o mezclarlas sobre la imagen existente. En el proceso, la artista cambia su contexto primario para crea simultáneamente ilusiones y presentar una nueva lectura comparativa de la percepción.
This work is a self-portrait , a diary in which the artist becomes the subject of observation and where every entry is in the form, an encoded moment of time.
The underlying idea takes as a reference the text of Roland Barthes
Roland Barthes, Camera Lucida, Reflections on photography (1990: 14):" The portrait-photograph is a dosed field of forces. Four 'image-repertoires intersect here, oppose and distort each other. In front of the lens, I am at the same time: the one I think I am, the one I want others to think I am, the one the photographer thinks I am, and the one he makes use of to exhibit his art. In other words, a strange action: I do not stop imitating myself, and because of this, each time I am (or let myself be) photographed I invariably suffer from a sensation of inauthenticity, sometimes of imposture (comparable to certain nightmares)."
Relating concepts such as identity, exposed but little examined, compulsive experiences, the project aims to generate an increase in visibility of a perceptive process, also emotional: that of obsessions. An eye-camera that obsessively shows the observed subject. The search for a contaminated identity that is not recognized verbally but that can be seen in the symbolic metaphors of repetitive and in many cases maladaptive behaviors.
In short, a metaphor for the neurosis of modern women with a high level of introspection and connection with their environment but with the need to develop strategies that allow to reduce the stress caused by a hostile environment and against a society that demands more than we can offer.
The audiovisual piece consists of three HD videos, each one of them describes and represents a week, 3x7 = 21 days of the artist with a duration of 6 min. They can be displayed individually or synchronized in a loop showing different days. The project is completed in one or several installations, called Altars, with pieces made in collage and photographs.
Ana Marcos creates video works employing mainly Identity material, such as a personal archive of photography and illustrations, which she subjects to subtle interventions, like animating or mix them into the existing image. In the process, the artist changes their primary context, simultaneously creating illusions and presents a new comparative reading of the differing perception of the physical intimacy norms of documentation. She investigates the impact of documentation on its future reception.
The reality is again somewhat unstable and ever staged. The aesthetics of what matter does not show ; objects and subjects are observed in a landscape that imagine another reality – image; it deserves to be looked as valuable.
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